Está a punto de entrar el verano.
Quiere decir que llegó el sol en todo su resplandor. Ya las antiguas civilizaciones celebraban el solsticio de verano con rituales y ceremonias adorando al astro rey, el sol. En el hemisferio dónde nos encontramos, se celebra entre el 21 de junio al 22, es el día más largo del año.
[one_second]En verano todo es actividad, energía, ganas de salir, de estar fuera, de ir y venir. La energía vital está en expansión. Para mantener esta actividad ociosa, alegre y saludable daré una serie de consejos:
1- Buena hidratación. Al aumentar la traspiración, las necesidades hídricas aumentan.
Tener especial cuidado con los niños y los ancianos.
Debemos beber sin tener sed, cuando ya nos deviene esta sensación quiere decir que nuestro cuerpo, tiene cierto grado de
deshidratación. Tomar agua con un poquito de limón o zumos naturales de frutas o verduras, también es adecuado infusiones frías con un poco de menta fresca o albahaca.
2- La alimentación debe ser lo más colorida posible.
Esta estación nos ofrece más que ningún otro color y sabores. Está llena de antioxidantes. Aunque a veces el calor hace perder el apetito si ofreces fruta fresca o ricas ensaladas seguramente se abra.
Cuidar mucho la higiene de los alimentos y de las manos, pues el calor es propenso a que las bacterias hagan de las suyas.
3-Hacer ejercicio, pero con moderación, aprovechemos los deportes acuáticos, caminar….. el tiempo lo permite.
4- Evitar la exposición prolongada al sol. sobre todo en las horas centrales del día.
Cuando nos expongamos a él, cubriremos nuestra piel con un protector solar natural sin parabenos, ni tóxicos. No será necesario que lo pongamos si lo estamos en las horas dónde la intensidad de los rayos UVA sea baja.
Los rayos solares hacen que podamos sintetizar la vitamina D que a la vez hará que fijemos el calcio en los huesos.
Otro beneficio interesante es que la luz solar estimula la serotonina, neurotransmisor que interviene en el estado de
ánimo.
A destacar la protección de los ojos con gafas de sol de calidad. El uso de sombreros o gorras protegerán la cabeza.[/one_second][one_second]
5- La mala circulación, muy frecuente en las mujeres, con el calor se resiente.
Evitar prendas de ropa ajustadas, vestirse con ropa holgada y de algodón.
No permanecer mucho tiempo sentado, reducir la sal y el picante.
Mantener las piernas en alto y duchas de agua fría irá genial para tener un buen retorno venoso.
Infusiones de hamamelis, castaño de indias o rusco ayudarán a solucionar esa pesadez.
6- Cuidado con las picaduras de los insectos, medusas, peces…
En la zona afectada poner hielo para bajar la inflamación, en el caso que no baje acudir a urgencias, especialmente si son
picaduras garrapatas, de peces o medusas. Los mosquitos son un incordio en verano, podemos ahuyentarlos
con una plantita de albahaca, citronella, lavanda, tomillo o romero.
7- Los hongos son otro amigo del verano.
Hay excesiva humedad en las zonas con pliegues o en los pies, el sudor y el contacto constante con el agua, favorecen su
proliferación.
Tendremos la precaución de secarnos cada vez que salgamos del agua y si andamos por piscinas hacer uso de chanclas.
En el caso que notemos picor en los pies es buen remedio toques con árbol del té.
Si el picor es en otras zonas, acudir a un especialista para que se haga una valoración.
Ahora solo queda disfrutar de esta maravillosa estación, mi preferida.[/one_second]
