Al fin estoy delante del ordenador escribiendo la receta del pan sin gluten.
Parece que es la primera vez que hago un pan así, pero la verdad es que llevo mucho tiempo probando, pero no daba con la receta que quería para ti.
Verás, el gluten es la proteína del trigo entre otros cereales y es como un `pegamento que junto al agua aglutina la harina y le da esta elasticidad y esponjosidad tan característica y tan deseable al pan
No comer gluten está de moda, sin embargo, no todas las personas deberían abstenerse de comerlo, tan solo las que sienten molestias como son distensión abdominal, gases, diarreas o estreñimiento, dolores articulares, cefaleas… En general y también desde mi punto de vista las enfermedades autoinmunes. Por descontado las alérgicas al gluten y las celiacas que habrán sido diagnosticadas por su médico.
El gluten puede producir en un intestino permeable inflamación, y por su capacidad pegajosa, dificulta la absorción de otros nutrientes poniendo en jaque al sistema inmunológico
Y te preguntarás por qué antes todo el mundo comía pan y casi nadie se quejaba.
Creo que, por dos razones, la primera es que los cereales antiguamente eran ecológicos y no estaban manipulados genéticamente. ¡Ojo al dato! Se dice que actualmente los granos modernos contienen 40 veces más gluten que antiguamente y la segunda razón es que la masa se fermentaba y esto permitía que fuera mas digestible.
Esta receta combina cereales, semillas y frutos secos.
En el caso de que fueras alérgico algún ingrediente lo cambias por otro similar.
Este es un pan altamente nutritivo y bajo en carbohidratos, destacan las vitaminas del grupo B y los ácidos grasos omega-3.
¡Vamos a la receta!
Ingredientes:
– 100 g de harina de arroz
– 100 g de harina de almendra
– 3 c.s de semillas de lino
– 2 c.s de semillas de chía
– 1 c.s de semillas girasol
– 1 c.s de semillas de calabaza
– 2 c.s de pylium o goma xantana
– ½ sobre de levadura en polvo
– 4 c.s de aceite de oliva AOVE
– Sal
– Orégano seco
– 1 taza y media de agua templada.
Elaboración:
– En un molinillo de café tritura todas las semillas.
– En un bol mezcla las semillas junto a las harinas y la levadura en polvo (puedes poner fresca), le agregas el aceite y vas removiendo para que se integre.
– El siguiente paso es verter el agua poco a poco mientras vas mezclando con las manos para que vaya cogiendo cuerpo la masa.
– Lo último será poner el orégano y la sal.
– En el mismo bol deja la masa que abras trabajado unos minutos y la tapas con un trapo una hora o dos.
– Calienta el horno a 180º.
– La masa que ya habrá fermentado un poco. (no pienses que sube como una masa con gluten, apenas se aprecia) la puedes poner en un molde o bien darle la forma que te apetezca.
– Hornéalo con fuego arriba y abajo entre 50 minutos a 1 hora.
– Vigila tu horno con un palillo, mira si sale limpio, si es así, tu pan está listo.
¡Disfruta de tu rebanada de pan!
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¡Espero lo disfrutes tanto como yo!
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